La verdad que si tengo que pensar en por qué me embarqué en la increíble experiencia de escribir en Mamá London, me vienen a la cabeza muchos recuerdos. Pero por encima de todo la ilusión con la que dos personas a las que no solo quiero, sin que admiro muchísimo, empezaron con este proyecto como si de un hijo se tratara. Esa sensación que te contagia, que te ilusiona, de la que quieres saber más y que sin duda, no quieres perdértelo y que sin pensarlo dos veces dije “sí, quiero” formar parte de Mamá London.
Tengo que reconocer que está siendo una experiencia estupenda, y sin darme cuenta ha pasado un año ya, y que sólo quiero seguir en esta línea. Me encanta compartir mi pasión por el arte, los museos, las galerías,… con todos vosotros. Una pasión que aprendí y heredé de mis padres, y qué mejor que poderla compartir con futuros papás y mamás.
Una de las partes que más me ilusiona de escribir en Mamá London es hacer que todos los niños pequeños vean en el arte algo bonito y enriquecedor. Desde pequeña escuché de mi madre “el arte da calidad de vida” y es verdad, seas quien seas y donde te encuentres, el arte siempre te abrirá la mente, te dejará vivir pequeños o grandes momentos que podrán formar parte de tus recuerdos más queridos. Como cualquier otra cosa que vivas con ilusión, pero para mí el arte es casi el 100% de mi vida diaria, tanto personal como profesional.
Lo que más “costaba” al principio era encontrar temas con los que poder transmitir las pequeñas pasiones que yo llevo dentro a los más pequeños de la casa, pero habiendo crecido junto a mi hermano los dos rodeados de arte, no quería dejar de intentarlo y cada semana, y poco a poco, conseguir llegar a la curiosidad de los niños. Ahora sólo espero que sigáis a nuestro lado muchos años más, y que podamos seguir disfrutando de ésta experiencia tan increíble todos juntos.
Gracias por este primer año, y seguiremos descubriendo Londres en todas sus variedades…