Psicooncología, seguro que pocos habéis oído hablar de ésta palabra. Como bien indica la misma, es psicología aplicada a la oncología, donde trabajamos tanto con pacientes oncológicos como con su familia y entorno. El papel del psicooncólogo es el acompañar a lo largo de la enfermedad tanto al paciente como a sus familiares; a su vez proporcionan herramientas para poder manejar mejor la enfermedad.
El asesoramiento a nivel psicológico en oncología, seria bueno ¿porqué? Porque es importante tener información que le ayude a aliviar la incertidumbre. A día de hoy el cancer es una enfermedad que esta en prácticamente los hogares de todo el mundo, ¿quién no tiene un familiar o un conocido que ha pasado o esta pasando por ésta enfermedad? Seguro que pocos o prácticamente nadie puede decir que no conoce a nadie en esta situación. Cuando la enfermedad se mete en nuestra casa, podemos denominarlo “invitado non grato”, no solo afecta al paciente, su familia su entorno también se ven afectados, aunque de manera indirecta.
Diríamos que el paciente es el protagonista de ésta historia, y su familia y entorno serian los actores secundarios (no por ello menos importantes). Cuando en al vida de la persona entra el cancer, ésta da un giro de 180º. Un cambio muy brusco que altera todos los planres, ilusiones, proyectos… y por lo general nos pilla desprevenidos. Y no solo me refiero al paciente, el protagonista, sino tambien a la familia.
Por lo general los familiares son los “olvidados” de la enfermedad, normalmente nos centramos mas en el paciente y no tanto en la familia, esos actores secundarios que están, a la sombra pero están.
Pero….realmente ¿qué papel desempeña un psicooncólogo?
Pues al igual que el psicólogo en general: escuchar. Tambien acompañamos al paciente en éste duro y tedioso camino, le ayudamos a que busque entres sus “armas” cuales son las mas adecuadas para hacer frente a ésta lucha, para enfrentarse a los miedos, incertidumbres, al futuro…. No hay que olvidarse de los familiares, como he comentado anteriormente, ellos tambien sufren la enfermedad de manera indirecta.
Ellos también sufren, incluso me atreveriía a decir que mas, aunque de una forma diferente; es decir, ellos realmente no saben qué hacer para ayudar y para hacer sentir bien al paciente. Llegando incluso a agobiarles.
El psicooncologo les da técnicas de cómo manejar la situación en función de las que ya posee la persona, llamémosle el cuidador.
En conclusión, el psicooncologo no sólo escucha … sino que se convierte en una persona clave, para que tanto el paciente cómo los familiares sepan usar sus propios recursos para hacer frente a la nueva situación, y poder afrontarlas de la mejor manera.